cocodriliano [
co-co-dri-lia-no]
[adjetivo] y [sustantivo masculino] Dícese de reptiles pertenecientes al
orden cocodrilianos.
- [sustantivo masculino] [plural]
Orden de reptiles que incluye los aligátores, caimanes, cocodrilos y gaviales.
Se trata de reptiles de
tamaño medio y grande; los cocodrilos enanos adultos miden
alrededor de 1 m de
longitud,
pero los grandes cocodrilos alcanzan y superan los 7 [sustantivo masculino]
Son animales de
vida predominantemente
acuática,
con patas cortas,
poco dotadas
para la
locomoción terrestre, y provistas de membranas interdigitales,
lo que las faculta, en
cambio,
para la
natación.
Sin embargo, el
órgano propulsor del cocodrilo en el
agua es
su poderosa cola, que oscila lateralmente
como la
aleta caudal de
un pez. El
cuerpo está recubierto de escudos óseos,
más o
menos soldados
con la
epidermis,
por lo que a
este grupo también se le da el
nombre de loricados. En
cuanto a
su anatomía interna, presenta muchas especializaciones, algunas de ellas
como consecuencia de la
adaptación a la
vida acuática (por ej., la
posesión de
un vasto paladar óseo, y de válvulas a la
entrada y
salida de las fosas nasales,
lo que permite al
animal sumergirse
sin llenar de
agua sus vías respiratorias), y otras
como resultado de
una evolución avanzada, que emparenta a los cocodrilos
con los reptiles
más evolucionados que han existido (los dinosaurios de épocas pretéritas) y
con las aves.
Así, los c. tienen
un corazón con cuatro cavidades totalmente separadas, y
un músculo que separa el
tórax del abdomen,
semejante al
diafragma de los mamíferos,
aunque esta semejanza
no implica homología. A
pesar de
sus ventajas anatómicas, el
grupo de los c. constituye
hoy un orden muy reducido,
con 22 especies agrupadas en
una sola familia, la de los cocodrílidos (algunos autores la subdividen,
sin embargo, en dos, y
aún en
tres familias); en
cambio a finales
del periodo
cretácico existieron
hasta 13 familias de c.,
con numerosas especies. Los cocodrilos
se hallan confinados
hoy a las regiones tropicales y subtropicales de
América,
Asia y
África,
así como a algunos puntos de la
región australásica. Todos viven en
agua dulce,
si bien una especie se aventura en el
mar, y
ha llegado a
colonizar islas
muy alejadas de los continentes. La
mayoría de los miembros
del grupo se alimentan de peces y animales acuáticos,
pero las especies mayores pueden
atacar mamíferos que
se acercan a
beber a la
orilla. El
hombre aprovecha la
piel de algunas especies, particularmente de los aligátores, que carecen de escudos óseos en el vientre;
también consume,
aunque en
grado limitado, los huevos de algunas especies sudamericanas de
caimán.
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