branquia [
bran-quia]
(Esta palabra proviene del latín branchĭa, y este del plural n. griego βράγχια).
[sustantivo femenino] Órgano
respiratorio de los animales acuáticos.
Se usa
más en
plural. Las b.
son,
por lo general, expansiones filiformes o laminares
del cuerpo,
muy vascularizadas, propias de animales
cuyo tamaño no les permite
subsistir con el
oxígeno que toman directamente a
través de la
piel. Tienen b. los anélidos acuáticos,
ya sea en
forma de penachos situados a los lados
del cuerpo, o de expansiones plumosas en
un extremo de éste. En los moluscos tienen la
forma de plumas, o
bien son laminares, y
se hallan albergadas en la
cavidad paleal. En los crustáceos consisten en láminas fijas a la
base de los apéndices torácicos o abdominales, o en expansiones foliáceas de
diverso tipo; la
estructura de las b. de las larvas acuáticas de insectos es
similar. Otros invertebrados marinos tienen
un sistema branquial semejante al de los anélidos. En los cordados, las b.
se hallan en la
faringe, la
cual aparece perforada
por hendiduras separadas
por tabiques
muy vascularizados: en
agua con oxígeno atraviesa la
pared faríngea por dichos orificios, permitiendo la
respiración. En los procordados, las hendiduras branquiales
son muy numerosas,
pero en los vertebrados,
su número máximo es de
siete. En los peces óseos suelen
existir cuatro hendiduras branquiales a
cada lado de la
faringe, separadas
por tabiques que constituyen los llamados arcos branquiales. En dichos tabiques
se implantan las b. o agallas, que toman el
aspecto de conjuntos de laminillas rojas. El
aparato branquial se halla recubierto
por el
opérculo en los peces óseos. En los vertebrados superiores
sólo se aprecian las hendiduras branquiales
durante las primeras fases
del desarrollo.
[sustantivo femenino] Órgano
respiratorio de los animales acuáticos.
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