antibiótico [
an-ti-bió-ti-co]
(Ver también espectro antibiótico).
[adjetivo] y [sustantivo masculino]
Sustancia producida espontáneamente
por un organismo viviente (hoy
día pueden
también obtenerse
por síntesis) y que posee
una acción antimicrobiana selectiva. La
era antibiótica comienza en 1929
con el
descubrimiento de la →penicilina
por A. Fleming;
desde entonces el
número de a. introducidos en
terapéutica ha sido
cada vez más numeroso, disponiéndose
hoy día de numerosas posibilidades de
combinación y
asociación que permiten
una acción más eficaz. En
este sentido, la
introducción de los a. puede
ser considerada uno de los pilares básicos
del espectacular desarrollo de la
medicina en el
presente siglo (junto al
descubrimiento de las
vitaminas y de los psicofármacos, al
perfeccionamiento de la
anestesia quirúrgica y de las técnicas de reanimación, al
gran avance de las técnicas quirúrgicas, etc. ). La
sensibilidad de los gérmenes
frente a los distintos a.
no es
siempre igual. De
acuerdo con esto, podemos
establecer una primera clasificación: a. de
amplio espectro (aquellos que actúan
sobre un número muy amplio de gérmenes), a.
con acción predominante
sobre las bacterias grampositivas, a.
con acción predominante
sobre las bacterias gramnegativas, a. de
acción predominante
sobre el
bacilo tuberculoso, a. fungostáticos (acción
sobre los hongos) y a. antiamebianos (acción
sobre las amebas).
No obstante, el
enorme empleo que
desde hace años
se efectúa de los a.
ha modificado, en algunos casos, la
sensibilidad de los gérmenes
frente a
antibióticos que
antes eran eficaces
contra ellos; ello obedece a la
aparición de las denominadas resistencias,
por mutación o
adaptación de los gérmenes.
Un caso muy característico es el
estafilococo, que actualmente es resistente, en
un número elevado de casos, a los a. que
antes actuaban
contra él,
lo que
ha motivado la
búsqueda de nuevos a. antiestafilocócicos. En
realidad, los a. han motivado
un auténtico trastorno ecológico en el
equilibrio entre los distintos microorganismos, y al
desaparecer algunos de éstos, han cobrado
importancia otros que
antes eran
poco importantes;
tal es el
caso,
por ej., de los hongos. Los a. actúan
por un mecanismo de interferencia;
merced a
su afinidad química con una sustancia indispensable para el
metabolismo del germen, desplazan a ésta y bloquean
así los procesos vitales de la
célula microbiana. Esta
acción puede
producir la
muerte del microbio (a. bactericidas) o
bien inhibir su crecimiento (a. bacteriostáticos). Algunos a.
no están exentos de ciertos efectos tóxicos
sobre el
organismo humano; esta toxicidad obedece a
tres factores; 1)
acción tóxica directa (sobre el
oído, el
riñón, etc. ); 2)
acción de sensibilización, produciendo fenómenos de →alergia; 3)
acción por alteración del equilibrio entre los microorganismos
del interior del cuerpo (así el a. puede
destruir,
junto a los microbios patógenos, a otros beneficiosos,
por ej.,
porque producen vitaminas). Actualmente,
se utilizan
con frecuencia las combinaciones de a.; estas combinaciones pueden
ser de
tres tipos: sinérgicas,
cuando los efectos de los a.
se potencian
entre si; aditivas,
si los efectos
se suman; y antagonistas,
si los efectos
se anulan
entre si. Los a.
más importantes en el
momento presente son: penicilinas, estreptomicinas, tetraciclinas,
cloranfenicol, cefalospori-nas, colistina, gentamicina y kanamicina.
Desde un punto de
vista ecológico los a. tienen
un significado de
defensa de comunidades que han
sufrido una coevolución. En
efecto, están producidos
por microorganismos
del suelo y
son inocuos
para otros microorganismos que conviven habitualmente en el
mismo hábitat.
Sin embargo,
son activos
contra microbios
no habituales
del suelo pero que podrían
vivir en él.
Cuando una espora de
este tipo de microorganismos (patógenos en
su mayoría) cae al
suelo,
donde podría
prosperar y
entrar en
competencia con los autóctonos, muere
por la
presencia de a. que
unas cuantas especies segregan
como defensa de
toda la
comunidad.
- [adjetivo] Dícese de la
acción de dichas sustancias.
[sustantivo masculino] [Medicina]
Sustancia que impide la
actividad microbiana.
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